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Francisco Rodríguez Oñate nació en morelia el 30 de noviembre de 1940, su inquietud artística despertó desde una edad temprana, fueron sus primeros hallazgos de la plástica en seminarios ilustrados con obras de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y especialmente está presente la fuerza sobrecogedora, persuasiva e irónica de José Clemente Orozco.
Egresó de la Escuela Popular de Bellas Artes y fue alumno de Alfredo Zalce, Javier Arévalo y Roberto Martínez. En 1965 realizó su primera exposición individual en las galerías de la rectoría de la U.M.S.N.H. a partir de ahí, sus obras trascendieron las fronteras y se exhibieron en varias partes del mundo, entre ellos: Estados Unidos, Guatemala, Venezuela, Chile, Costa Rica, Honduras, Nicaragua, Francia, tanto en exposiciones individuales como colectivas, inclusive la extinta Unión Soviética adquirió una colección de su obra artística titulada “CALAVERAS DE LA REVOLUCIÓN”.
En los años setenta, la casa editorial Fimax Publicistas incluyó más de sesenta viñetas de su autoría en la publicación “Rincones de Morelia”, con prólogo de Porfirio Martínez Peñaloza y textos de Guadalupe Espino. Las páginas ilustradas del libro comprueban la síntesis de las formas, pero sin renunciar a los detalles estructurales en edificios, paisajes y perspectivas urbanas de la capital Michoacana.
Debido a su interés por la promoción cultural, Oñate se desempeñó en la función pública como subdelegado de turismo en Pátzcuaro e impulsó la puesta en marcha del Museo Agrarista de Tzurumutaro y el de los hermanos Rayón en Tlalpujahua. Francisco estuvo al frente del área de artes plásticas de la Casa de la Cultura de Morelia, y tiempo después, fue director de difusión cultural de la Casa de las Artesanías de Morelia. Miembro fundador de los museos de arte contemporáneo de Morelia MACAZ, Sahuayo, Zacapu y del museo de la estampa en Cuitzeo. Cabe mencionar que gran parte del acervo del MACAZ se consiguió gracias a la intervención directa del maestro con los artistas, entre ellos, José Luis Cuevas, Leonora Karrington, Tamayo, María Izquierdo, Adolfo Mexiac, entre otros.
Por último, su labor en la gestión de espacios culturales lo llevo a ser jefe de Departamento del Exconvento Jesuita en Pátzcuaro y finalmente del Museo Colonial de Morelia.
Realizo trabajos de gran formato, por mencionar algunos, “el encuentro” (Hidalgo y Morelos en Charo) que se encuentra en Casa de Gobierno ahora Casa Michoacán, “la fiesta” en la bodega norte de la cervecería Modelo, mural “Fiesta en Michoacán” en el hospital Los Ángeles de Morelia, estos en colaboración de la Maestra Marcela Ramírez .
Poseedor de una sensibilidad que supo vibrar a cada momento, Oñate fue un artista que supo proyectar toda esa vida y fuerza interna a través de sus lienzos.
En esta retrospectiva se muestra una evolución a lo largo de sus diferentes etapas creativas a través de los años. Su inquietud por representar las diversas problemáticas sociales y políticas de su época, lo llevo a experimentar con todas las técnicas que tenía a su alcance.
